Con este tránsito es posible que muchos temas que son tabú encuentren su espacio para desarrollarse ya que la entrada de Venus en este signo traerá la energía de los placeres de la vida a un espacio más desinhibido, más profundo y que a veces nos confronta con lo que vivimos regularmente para que transformemos nuestra mirada. Este tránsito también nos servirá para revisar los patrones de comportamiento asociados a el amor, el dinero e incluso nuestro propio cuerpo, de hecho será el momento perfecto para replantearnos esos patrones y empezarlos a transformar si vemos que ya no nos aportan o nos están estancando.